La escena de los eSports en Argentina
Quizás te estés preguntando de dónde viene el término “eSports ”. Bueno, la letra “e” viene de la palabra electronics y Sports de deporte, lo que traducido sería Deportes Electrónicos.
Hasta hace unos años atrás, para muchos defensores de la pureza del lenguaje, era inconmensurable el hecho de considerar a los videojuegos como un deporte. Los dichos afirmaban que, para que serlo, se debía considerar que no se usaba la fuerza, no se corría o no había un uso del cuerpo o capacidad física como tal.
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Pero estas afirmaciones dejaban de cobrar lógica cuando se sacaban ejemplos como el del ajedrez, que es considerado por el Comité Olímpico Internacional (COI) como una disciplina deportiva, o la Fórmula 1 donde los pilotos van sentados en sus respectivos vehículos sin hacer uso de una fuerza física.
La escena eSports mueve masas alrededor del mundo. En el último tiempo recaudó más de USD1.000 millones.
En este sentido, es natural que muchas personas que se han quedado con la idea de que los videojuegos son para niños y que no son más que una pérdida de tiempo, crean que es imposible considerar a un jugador como deportista y a un grupo conformado, como equipo de eSports.
La verdad es que, cuando se decide crear un equipo, los jugadores entrenan de manera individual y grupal asistidos por un entrenador o coach que analiza estrategias y formas de juego dentro de la categoría a la cual pertenece el team. Además reciben asistencia por parte de psicólogos, tienen preparadores físicos, nutricionistas, fisioterapeutas, entre otros. Es que así como cualquier otro deportista, los jugadores profesionales de videojuegos, tienen lesiones típicas, necesitan rutinas de entrenamiento, mantener un estado físico para no flaquear a causa del sedentarismo, recibir asistencia psicológica a la antes y durante competiciones y más.
Ser el mejor, requiere de sacrificios y no cualquiera puede serlo. Se necesita conocer a fondo la categoría en la que uno se desenvuelve, agudizar sentidos, estudiar mapas, conocer al equipo, reconocer las debilidades y errores individuales y corregirlas, así como dedicar largas horas a entrenar.
Para ser el mejor, se necesita agudizar sentidos, estudiar mapas, conocer al equipo, reconocer las debilidades y errores individuales y corregirlas, así como dedicar largas horas a entrenar.
A diferencia de lo que muchos creen, los deportes electrónicos tienen varios años. Quizás en un principio surgieron de manera no oficial, como fue el caso del primer torneo de videojuegos organizado por la Universidad de Stanford en 1972 llamado ‘Spacewar!’, donde el premio tan sólo era una suscripción a la revista Rolling Stone, y nada más.
Sin embargo, podemos marcar un hecho que ocurrió en la etapa posterior al estallido comercial de los videojuegos en los 90 ‘s. Un evento llamado Electronic Entertainment Expo (E3) organizado en 1997 en Estados Unidos. En esta convención se reunió por primera vez a diferentes franquicias de juegos online, junto a numerosos fanáticos, diferentes marcas y concursos de todo tipo. En particular, El videojuego ‘Quake’, realizó la instancia final de un campeonato llamado Red Annihilation, donde 2000 usuarios se habían enfrentado previamente de manera online, hasta que quedaron los 16 mejores. Los mismos, se disputaron el premio, que constaba de una Ferrari 328 GTS de la colección personal de John Carmack, de manera presencial en el evento, marcando así el primer campeonato de eSports de la historia.
Esto concluyó con la consagración del jugador Dennis “Thresh” Fong como ganador del torneo y, lo más importante, fue que también se convirtió de esta manera en el primer jugador profesional de eSports.
En la actualidad, los eventos donde se disputan los diferentes campeonatos y mundiales de eSports, mueven alrededor de USD1.000 millones anuales, cifra que va aumentando acorde pasan los años. Estos, se organizaban de manera presencial, antes del contexto de pandemia, en estadios multitudinarios. Así es, estadios con capacidad para 30.000 a 40.000 personas, como en un partido de fútbol.
Si bien la presencia de público por la situación del Covid-19 fue suspendida este último tiempo, a diferencia de lo que muchos pueden creer, los enfrentamientos y torneos de eSports se siguieron realizando. Es que antes, inclusive teniendo la oportunidad de asistir a los eventos, estos eran transmitidos en diferentes plataformas de streaming, debido a que la mayoría del público era de diversos países alrededor del mundo (40 a 50 millones de personas han llegado a presenciar un mismo acontecimiento de manera online).
Si bien la presencia de público por la situación del Covid-19 fue suspendida este último tiempo, los enfrentamientos y torneos de eSports se siguieron realizando.
En Latinoamérica, en general, la inserción al mundo de los eSports, fue lenta. A comparación de otros países de Asia, Europa y Norteamérica, para LATAM, la apuesta no fue inmediata. Todo esto pese al hecho de que, desde que existe la banda ancha en nuestro país, siempre se han organizado equipos, hecho competiciones en convenciones y reunido en cybers, todo de manera under.
Se puede decir que, recién con la creación de las ligas de League of Legends, Counter Strike y Fútbol virtual, la escena de los eSports en Argentina, se comenzó a considerar profesional. Y, tras la unificación de las ligas de Sudamérica en una Liga Latinoamericana, que dió nacimiento a las Ligas Master regionales, de cara a la formación, presentación y competición, a nivel mundial.
Algunos de los equipos más conocidos en el mundo gamer son: Malvinas Gaming, Dragons, Sinisters, Isurus Gaming, Furious, Hafnet, Free Agents Rushers, Coscu Army, Savage, y el reciente KRÜ esports, quien dió una sorpresa al llegar a cuartos de finales en el Master de Valorant.
Si te imaginaste que una agencia o “busca talentos” es el que contacta a un jugador, en parte, estás en lo cierto. Muchas veces el contacto pasa por una cuestión de buen desempeño y la “suerte” de que alguien vea tus dotes como gamer. Inclusive, siendo menor de edad, si contás con el respaldo de tus padres, podés ingresar a un equipo profesional de eSports.
La otra forma, es que de manera individual comiences a formar un equipo amateur, practiquen de manera regular, hagan rutinas, conozcan las habilidades y debilidades de todos los miembros y, así, poder llegar a contactar con una agencia.
Pero eso sí, siendo un camino u otro, el fin es que seas uno de los mejores jugando “ese” juego en particular que tanto amas. Eso requiere mucha dedicación, largas horas pensando y ejecutando estrategias, agudizando los sentidos, la escucha, los reflejos o reacciones y que, todo eso, lo combines con una dieta sana y un buen descanso. En algunas oportunidades grandes agencias han enseñado sus instalaciones y las diferentes “etapas” que tiene un día común trabajando como gamer profesional.
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