En total, la escena de los deportes electrónicos suma 2700 millones de jugadores en todo el mundo. Se calcula que 200 millones se encuentran en Latinoamérica y 19 millones en Argentina. El mercado global de los esports está valuado en 1.100 millones de dólares, con una proyección de crecimiento de un 25% interanual para los próximos cinco años. Los especialistas de la industria pronostican 1.600 millones de dólares de facturación de acá a tres años.
Este crecimiento que se viene dando de una manera exponencial también provocó que muchos equipos se vayan profesionalizando como es el caso de la organización Furious Gaming, la cual fue fundada en 2012. Según un informe global de la consultora Newzoo, América Latina es la tercera región que más creció en la industria de los videojuegos en los últimos tres años. El incremento fue de un 11% y lo siguieron Norteamérica y EMEA (Europa, Oriente Medio y África).
La pandemia de COVID-19 fue lo que le permitió a Argentina tener un mayor crecimiento en lo que respecta a la industria y ubicarse en el tercer lugar detrás de México y Brasil. El boom de usuarios que tuvo el streaming y los esports hicieron que el sector creciera un 25% en plena pandemia tanto a nivel local como en el mundo. Para 2025, Argentina alcanzaría la suma de 120 millones de dólares en este segmento que revoluciona el mundo del entretenimiento tecnológico.
En Juniper Research calculan que los deportes electrónicos alcanzarán la cifra de 3.500 millones de dólares en anuncios y derechos de retransmisión hacia 2025, lo que significa un crecimiento del 70% en los próximos cuatro años. Todo esto teniendo en cuenta que cada vez más gente accede a este mundo gamer, donde los esports son el nuevo puente de inversión para las marcas, pensada estratégicamente en los usuarios, consumidores de ambos géneros y todas las edades.
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