Con el fin de preparar a la próxima generación de talentos en la industria de los esports, la Asociación de Esports Británica (BEA) anunció sus planes para construir un campus dedicado exclusivamente al desarrollo de las distintas áreas vinculadas a los deportes electrónicos. Bajo el nombre de National Esports Performance Campus, las instalaciones estarán ubicadas en Riverside Sunderland (Inglaterra). Se tratará de un espacio que impulsará tanto a los jugadores y entrenadores como el área de negocios, vinculados al sector de administración y gestión.
Además de sostener un plan educativo, se convertirá en una nueva sede para los esports en Europa y estará preparada para organizar eventos de ese ecosistema campamentos de verano y también cumplirá la función de centro de entrenamiento para el equipo de esports de Gran Bretaña. El campus incorporará salones destinados a la educación, salas de entrenamiento, cabinas equipadas para realizar streaming y una arena como espacio competitivo. A medida que la industria alcanza más relevancia en el mercado del gaming, habiendo superado los mil millones de dólares ganancias en 2021 globalmente (acorde al reporte de Newzoo), surgen cada vez más proyectos de institucionalización de la práctica para preparar a los próximos profesionales a través de procesos de educación formalizada y especializada.
“El Reino Unido es el segundo mercado más grande de Europa, ubicado en el sexto puesto globalmente. Esto habla del potencial de los esports que capitalizarán sobre la popularidad del gaming con talentosos competidores emergiendo y una audiencia en crecimiento que disfruta de mirar y disfrutar esports”, destacó el CEO de BEA, Chester King, sobre este proyecto. El directivo aseguró que se trata de un mercado que explotará en la región y no desaprovechará la oportunidad de contribuir a su imparable desarrollo. Cada vez vemos más proyectos similares alrededor del mundo, tras la reciente noticia de la próxima apertura de Esports Koutou Gakuin, la escuela secundaria de esports de Japón.
Chester King se refirió a Sunderland como una ciudad ambiciosa con mucho énfasis en el futuro, lo que la llevó a ser un destino adecuado para el proyecto. “El campus será un espacio de inspiración, donde los jugadores y entrenadores podrán trabajar, aprender y desarrollarse. Son instalaciones muy necesitadas y a través de las experiencias de mi equipo entendemos su importancia”, explicó. El proyecto tiene fecha de apertura para el tercer trimestre de 2022, por lo que ya se encuentra en etapas avanzadas camino a volverse realidad.
Preparado para ofrecer acceso a los equipamientos, espacios de entrenamiento y apoyar a la región a través de la inversión, la asociación buscará convertir al campus en “un centro de esports reconocido globalmente, capaz de atraer y desarrollar a los mejores talentos de esports en el mundo”. El Director Ejecutivo del ayuntamiento de Sunderland, Patrick Melia, declaró: “Los esports han sido un fenómeno de éxito global y es un mercado de gran crecimiento en el Reino Unido. La decisión de BEA pone a Sunderland en el corazón latiente de eso y no podríamos estar más contentos”.
Cada vez serán más los proyectos de esta índole que surgirán en distintas partes del mundo. En Latinoamérica existieron y existen distintos proyectos de asociaciones que fallaron estrepitosamente, debido enfoques y formas de proceder que las llevaron a perder el apoyo de los actores de la escena. Los intereses cruzados llevaron a que el concepto Asociación de Esports sea visto como algo negativo, justificadamente. Esto hace que este tipo de procesos de institucionalización de la práctica resulten más distantes y sean más difíciles de procesar, pero no hay dudas de que es un fenómeno que llegará, tarde o temprano, de la mano de figuras focalizadas en hacer crecer la escena y por el propio peso de la industria.
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