Resulta que Rikuta Kiyoki, mejor conocido como Kerorira, quien trabajó como diseñador de personajes y director de animación de la adaptación al anime de Bocchi the Rock!, anunció el lanzamiento de un libro titulado “FROG SKETCH”. El libro de 270 páginas a color incluye algunas correcciones a la animación de Bocchi the Rock! y una serie de ilustraciones originales. Poco sabía el popular artista que este sería el detonante de una verdadera catástrofe organizacional.
Una gran cantidad de fotografías se hicieron tendencia en redes sociales mostrando una enorme fila que se dirigía hacia un solo punto: el stand del artista Kerorira en donde se estaba vendiendo el libro de Bocchi the Rock!. La llamada “Fila Kerorira” comenzó a extenderse por decenas y luego por centenas de personas que esperaban conseguir una copia del libro que únicamente iba a venderse dentro de las instalaciones del evento, por lo que la gente no tenía ningún problema con estar bajo el sol abrasador del verano.
Un usuario incluso compartió una fotografía de un mapa en donde se podía ver la dirección que estaba tomando la fila: dos vueltas en el estacionamiento y la explanada del lugar, saliendo a la carretera y comenzando ya una segunda vuelta allí. La cantidad de personas que esperaban comprar el libro de Bocchi the Rock! era simplemente espectacular. Y no, no es la fila para entrar a las instalaciones de la convención.
El preciado libro de edición limitada (si es que Kerorira no decide mandar a imprimir más) tenía un precio de 5,000 yenes (alrededor de 35 dólares), bastante justo considerando la cantidad de páginas que incluye. Sin embargo, por su condición de “limitado”, algunos revendedores ya han aparecido en plataformas de ventas en Internet y han elevado el precio seis veces, hasta un promedio de 30,000 yenes (más de 207 dólares), aprovechándose de los fanáticos de Bocchi the Rock!.
Esta situación es común cuando hay un lanzamiento de esta magnitud. Según los reportes, Kerorira limitó la venta a solo una copia por persona, por lo que podemos asegurar que esas personas solo hicieron fila únicamente con la intención de conseguir una copia del libro y luego revenderla para conseguir ganancias. Por supuesto, si Kerorira anuncia que lanzará más copias de este preciado libro, el negocio de las reventas se irá al traste, pero todo está en manos del artista.
En fin, estaba claro que la situación iba a atraer una variedad de comentarios:
- «Los trabajos de Kerorira son bastante difíciles de conseguir. Venderlo es una gran oportunidad de negocios».
- «La historia de Kerorira se está convirtiendo en una tendencia para las Comiket de cada año desde que apareció Bocchi the Rock! en el mapa… Quizás pienses que debió prever esta situación, pero los artistas solo pueden vender un número limitado de copias para no romper la ley, pues recordemos que está usando una propiedad intelectual que no le pertenece».
- «Me parece que la fila era extremadamente larga, pero no tenía sentido. Si eres un visitante constante de la Comiket sabes que los artistas no pueden traer muchas copias de un libro independiente. Si estabas hasta el fondo debías saber que no tendrías oportunidad de conseguirlo».
- «¿Entonces el libro está agotado o todavía está disponible?».
- «¿Se imaginan que el propio Kerorira se guardó unas decenas de copias para venderlas a sobreprecio él mismo?».
- «Creo que cuando tienes sentido común ya no te formas en una fila para la que sabes que no tienes oportunidad de conseguir el producto».
Fuente: Otakomu